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Ciencia
El anuncio de una vacuna rusa preocupa a los expertos: ‘Esto va más allá de la estupidez’
Las vacunas se encuentran entre los productos médicos más seguros del mundo, pero eso solo se debe al intenso rigor de los ensayos clínicos.
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Cuando Vladimir Putin anunció el 12 de agosto que Rusia había aprobado una vacuna del coronavirus —sin evidencia de pruebas clínicas a gran escala— los expertos en vacunas comenzaron a preocuparse.
“Me parece verdaderamente aterrador. Es muy riesgoso”, dijo Daniel Salmon, director del Instituto para la Seguridad de las Vacunas de la Universidad Johns Hopkins.
Salmon y otros expertos dijeron que Rusia tomó una decisión peligrosa al saltarse la fase 3 de las pruebas, durante la cual se puede determinar si la vacuna funciona mejor que un placebo y no causa daños a algunas de las personas que la reciben.
A diferencia de los medicamentos experimentales que se les da a los enfermos, las vacunas están destinadas a millones de personas sanas. Por eso, deben superar altos estándares de seguridad. Si cientos de millones de personas se vacunan, incluso un raro efecto secundario podría afectar a miles de personas.
A lo largo del siglo pasado, los investigadores han desarrollado maneras cada vez más poderosas de probar las vacunas para que sean seguras y eficaces. Aprendieron algunas de esas lecciones a la mala, cuando una vacuna nueva provocaba algún daño. Sin embargo, las vacunas ahora se consideran entre los productos médicos más seguros del mundo, gracias al intenso rigor de las pruebas clínicas que dan seguimiento a su seguridad y eficacia.
Estas pruebas generalmente comienzan antes de vacunar a alguien, cuando los investigadores la inyectan a ratones o monos para ver cómo reaccionan.
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