Caitlin Clark y el secreto detrás de su increíble rendimiento

Cuando Caitlin Clark, la jugadora de 22 años de la Universidad de Iowa, se alinee contra el equipo de la Universidad de Connecticut el viernes por la noche, lo más probable es que lance el balón desde mucho más allá de la línea de 3 puntos. Contra todo pronóstico y toda filosofía de entrenamiento, se sabe que lo más probable es que lo haga una y otra vez. Se espera que quien tenga la mala suerte de intentar defenderla no podrá hacer otra cosa que encogerse de hombros.

¿Cómo lo logra, más allá de tener un talento único en una generación? Clark entrena de manera agresiva y busca desarrollar resistencia. Sus músculos deben ser capaces de soportar rápidas explosiones de velocidad y agilidad y tener la potencia necesaria para impulsarla hacia el cielo para lograr sus característicos tiros cerca de la media cancha. También deben ser lo bastante fuertes para mantener esos movimientos rápidos durante todo un partido de gran tensión sin fatigarse demasiado. Además, necesita resistencia mental para mantener ese nivel de rendimiento sin perder la confianza o la concentración cuando las cosas no vayan bien.

Muchas de esas habilidades se adquieren en el gimnasio con Lindsay Alexander, entrenadora asociada de fuerza y acondicionamiento del equipo femenino de baloncesto de Iowa. Alexander se enfoca en una sola pregunta: “¿Cómo hacemos que una atleta sea más duradera?”.

La respuesta es una combinación de acondicionamiento, trabajo aeróbico y pliometría, un grupo de ejercicios que utilizan movimientos rápidos para desarrollar la fuerza muscular. Las jugadoras hacen sentadillas y peso muerto, y utilizan el press de banca para mejorar la fuerza de la parte superior del cuerpo y del tronco. Alexander se centra especialmente en fortalecer las piernas de las jugadoras, que son cruciales para los tiros.

Alexander también trabaja con Clark y otras jugadoras para mejorar su salud cardiovascular mediante ejercicios conocidos como intervalos o carreras de ritmo: las jugadoras corren a un ritmo intenso y luego hacen breves descansos para recuperarse. Con el tiempo, este tipo de entrenamiento facilita que sus cuerpos se recuperen rápidamente de la actividad de alta intensidad.